
Cada día es más común que los adultos padezcan ansiedad y depresión debido a que vivimos en una sociedad que nos exige mucho, tenemos muchas responsabilidades y queremos abarcar más de lo que podemos. Por ello, surgen los problemas de ansiedad y depresión. Sin embargo, no sólo los adultos somos los que padecemos estos dos problemas, también ha ido en aumento el número de niños que los padecen.
Normalmente, los problemas psicológicos que padecemos los adultos tienen una serie de síntomas que son los que hacen visible ese problema, y algunos de estos síntomas en los niños (para el mismo problema) suelen ser diferentes. Hay muchas acciones que nos indican que una persona tiene ansiedad; por ejemplo si se muerde las uñas, se arranca el pelo, etc. En cuanto a la depresión se ve a la persona más apática, menos activa.
Desde nuestro centro creemos que es importante que se aborden estos problemas, especialmente cuando los padecen los niños ya que pueden afectar a su desarrollo tanto social como personal. Por eso, queremos compartir con vosotros este artículo publicado por el COP (Colegio Oficial de Psicólogos).