
La comunicación es muy importante en cualquier tipo de relación, pero todavía más si cabe en la de pareja. Las relaciones de pareja son muy íntimas y muy cercanas, por eso cuando no hay buena comunicación se ven muy afectadas. Para poder tener una buena comunicación es imprescindible que ambos miembros pongan de su parte, y ambos deben aprenden a hablar pero también a escuchar. Para que la relación de pareja sea satisfactoria para los dos miembros es importan que en primer lugar nos descubramos a nosotros mismos y seamos capaces de reconocer y asumir nuestras limitaciones. Ya que si sabemos en qué parte estamos fallando habremos dado un gran paso para solucionarlo.
Una vez hayamos llegado a este punto hay que aprender cómo deben decirse las cosas, lo mejor para comunicar una opinión o formular una queja ante otra pasada es ser asertivos. Esto significa que no podemos decir las cosas de forma agresiva, dando por hecho que nuestra versión del problema es la única posible pero tampoco podemos aceptar todo lo que se nos diga a pesar de que no pensemos así. Una forma de comunicación agresiva va a provocar en la otra persona la misma agresividad y lo único que obtendremos es una discusión en la que cada uno defenderá su punto de vista sin escuchar al otro (incluso insultándolo) y no lograremos ninguna solución. Si por el contrario aceptamos cada palabra que la otra persona diga a pesar de nuestra opinión, la otra persona creerá que la relación y la comunicación están bien pero aquella que no da su opinión no estará bien en esa relación.
La forma asertiva de comunicarnos consiste en expresar nuestra opinión, formular una queja, hacer una petición, etc. razonándolo, siempre respetando la opinión del otro, y en caso de ser una queja pidiendo un cambio concreto que nos gustaría que hiciera. Aprender a hacer esto de forma adecuada resulta difícil cuando estamos acostumbrados a comunicarnos de forma agresiva o pasiva. Esta forma de comunicarnos es la más adecuada independientemente de la relación que tengamos con la otra persona y es la mejor opción si queremos hacer una petición. Sin embargo, de la misma forma en que asertivamente hacemos una petición debemos saber rechazar la que nos puedan hacer y aceptar que rechacen una petición que nosotros hagamos.